La decisión ordenó reajustar una pensión con el IPC. La falta de integración de ese indicador “derivó en un paulatino y significativo deterioro de la capacidad adquisitiva del haber previsional”, afirmó el fallo judicial.
Lo decidió la Cámara Federal de Mendoza por considerar que de lo contrario habría una pérdida del valor económico del haber en relación con el costo de vida real y actual.
Una decisión judicial consideró que, bajo ese mecanismo, los jubilados sin bono perdieron alrededor del 50% del poder adquisitivo sus haberes.